Procedimientos Técnicos
Los Puntos al Pasado e Hilos Contados
Puntada a puntada
El bordado Popular Serrano es considerado como técnica mixta ya que utiliza los dos procedimientos a hilos contados y a dibujo dentro de un mismo ejemplar y en cada uno de los motivos.
Se señalan previamente los dibujos y se rellenan con gran variedad de puntos pertenecientes a la técnica de “bordado al pasado” y por la forma de “ hilos contados”. Algunos de estos puntos llevan nombres de sabor popular: punto de lomo, punto media yema, ojito entero, espina de pez, punto de ladrillo, siento la silla, las torrinas, el empedrao, ojito entero, ojito partido.
Con el cordoncillo en negro se señalan los contornos. Si esto no sucede se debe a influencia moderna.
Por la forma de sus puntos la técnica es de tipo ajedrezada y delata la procedencia persa.
Cuando alguien se asoma al bordado popular que ha pervivido en la Sierra de Francia de Salamanca, sobre todo en los momentos donde este sale de la oscuridad de las arcas donde ha permanecido encerrado todo un año, para pulir balcones y ventanas en el día del Corpus en La Alberca o Mogarraz se ve hipnóticamente arrastrado a la contemplación de tanto colorido que se desparrama por ventanas y balcones. Luego fijándose más entre una algarabía de ramas y flores entrelazadas se encuentra con los “bichos”, pajaras, pollas, gallos, dragones, truchas, peces que danzan entre los abigarrados atauriques. Técnicas y motivos son los que le dan su originalidad.
La Técnica de a dibujo, al pasado e hilos contados da lugar a muchas variantes que depende del color utilizado y de la disposición y número de hilos contados. En el Catalogo de Bordados del Instituto Valencia de Don Juan, realizado por Doña Maria Angeles Gonzalez Mena encontramos hasta 36 puntos. Los puntos siguientes se han extraído del dechado de Natalia Cenzual, de Miranda del Castañar.
GALERIA DE PUNTOS DEL BORDADO
De cómo se han llegado a tantas variantes nada sabemos, presumimos, que al igual que los motivos, son intervenciones de mujeres anónimas que lo fueron depositando en el acervo de la cultura popular. Se copiaban modelos, y se hacían escuelas de seguidoras de determinadas mujeres verdaderamente maestras artesanas.
En nuestra visita a los municipios de la sierra de Francia nos hemos encontrado solo con otros dos dechados o muestrario. Uno cuelga en las paredes de la Casa Albercana de Satur y Juanela y se hizo en la primera mitad del S.XX.
Estos puntos se alternan tanto por el gusto de las creadoras como por los tamaños de los diferentes campos que han de ser rellanados.
Las mayores colecciones de textiles españoles cuentan con numerosos dechados o muestrario de puntos de todas las escuelas de bordados, a excepción de esta, de la que no hay un solo ejemplar de siglos anteriores, dándose los dechados más bien en el último cuarto del S.XX e inicios del XXI.
A diferencia de otros tipos de bordados populares este bordado es de difícil aprendizaje debido a la cantidad de puntos y motivos y la enseñanza ha de hacerse siempre con el antiguo método de aprendizaje de toda artesanía, con el método del aprendiz, con escuela, difícilmente puede ser autodidácta.
En la actualidad existen cuatro publicaciones, la más antigua, elaborada por la Asociación de Mujeres Artesanas de la Sierra de Francia, recogió fundamentalmente los motivos, que guardaban celosamente las bordadoras en papel de calco muy fino y que se dio a las 35 mujeres bordadoras de la Asociación y se dejó un ejemplar en Ayuntamientos de la Sierra de Francia. Otra publicación, de Carmen Requejo y su hija Isabel Pena Requejo de La Alberca, en donde se intenta que pueda servir de manual El bordado tradicional de la Sierra de Francia. Posteriormente, la Red Arrayan de Cultura, Patrimonio y Medio Ambiente elaboró los contenidos del Manual de Salvaguarda del Bordado Popular Serrano que se puede descargar en esta misma web.
Su conservación, dado que ya el sistema de madres a hijas va perdiendo fuerza por muchas razones que tienen que ver con nuestro tipo y ritmo de vida, que cada vez más no hace diferencia entro lo rural y lo urbano, ha de hacerse mediante cursos especializados capaces de transmitir el universo del Bordado Popular.
En las fotografías que acompañan, podemos ver al detalle los numerosos puntos en la composición, son de colecciones privadas de Bordadoras actuales en la Sierra de Francia.